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Reconecta con tu cuerpo.

Más allá del ejercicio: Una introducción a la forma física somática

Descubre cómo el fitness somático cambia el enfoque de lo que tu cuerpo hace a lo que siente. Aprende técnicas sencillas para liberar la tensión y mejorar tu conexión.
 |  Emma Sterling  |  Fitness & Movement
Una mujer practica fitness somático acostada, concentrándose en su respiración y sensaciones corporales.

En nuestras vidas ocupadas, es común sentirnos desconectados de nuestros cuerpos. Podemos notar una tensión persistente en los hombros, una mandíbula apretada o una sensación general de estar "atrapados en nuestras cabezas". Aunque las rutinas de fitness convencionales ofrecen muchos beneficios para la salud cardiovascular y la fuerza muscular, a menudo hacen hincapié en objetivos externos: repeticiones completadas, kilómetros recorridos o calorías quemadas. La forma física somática ofrece un enfoque diferente, uno que cambia el enfoque de lo que hace tu cuerpo a lo que siente tu cuerpo.

Este artículo proporciona una introducción directa a los principios de la forma física somática, explicando qué es, cómo funciona y cómo puedes comenzar a incorporar sus técnicas simples pero profundas en tu vida.

¿Qué es exactamente la forma física somática?

La palabra "somática" proviene de la raíz griega soma, que significa "el cuerpo vivo en su totalidad". La forma física somática no es una marca específica de ejercicio, sino más bien un enfoque del movimiento que prioriza la conciencia interna y la sensación. El objetivo es perfeccionar la comunicación entre tu mente y tu cuerpo.

Imagina que realizas una sentadilla simple. En un entorno de gimnasio típico, tu enfoque podría estar en mantener la espalda recta, bajar las caderas por debajo de las rodillas y completar un cierto número de repeticiones.

En un enfoque somático del mismo movimiento, tu atención se dirigiría hacia el interior. Podrías notar:

  • La presión de tus pies en el suelo.
  • El cambio sutil en el equilibrio al bajar y subir.
  • La secuencia de activación muscular en tus piernas y glúteos.
  • El ritmo de tu respiración durante todo el movimiento.

La forma externa es secundaria frente a la experiencia interna. Es una práctica de escuchar las señales del cuerpo en lugar de imponerle una orden.

Enfoques de fitness: Una comparación
Aspecto Fitness tradicional Fitness somático
Enfoque principal Rendimiento externo (repeticiones, velocidad, forma) Sensación interna (sentimiento, conciencia)
Objetivo Fuerza, resistencia, estética Integración mente-cuerpo, liberación de tensiones
Ritmo A menudo rápido y repetitivo Típicamente lento, suave y exploratorio
Pregunta central «¿Lo estoy haciendo correctamente?» «¿Qué se siente esto?»

La conexión con el sistema nervioso

En su esencia, el movimiento somático es una forma de trabajar directamente con el sistema nervioso. Nuestro sistema nervioso autónomo tiene dos ramas principales: el sistema simpático ("lucha o huida") y el sistema parasimpático ("descanso y digestión"). La vida moderna, con sus constantes factores de estrés y estímulos, puede hacer que muchos de nosotros operemos en un estado de baja activación simpática. Esto puede manifestarse físicamente como tensión muscular crónica, respiración superficial y problemas digestivos.

Las prácticas somáticas, que a menudo involucran movimientos lentos, suaves y conscientes, pueden ayudar a guiar al sistema nervioso hacia un estado parasimpático. Al prestar mucha atención a las sensaciones físicas, envías señales de seguridad y presencia a tu cerebro. Este proceso puede ayudar a liberar patrones de tensión acumulados con el tiempo debido al estrés, lesiones o hábitos.

Formas simples de comenzar

Integrar un enfoque somático no requiere equipo especial ni clases. Comienza con el simple acto de prestar atención. Aquí hay algunas prácticas fundamentales que puedes probar:

  • El escaneo corporal: Acuéstate cómodamente boca arriba con los ojos cerrados. Comenzando por los dedos de los pies, lleva lentamente tu atención a cada parte de tu cuerpo, una por una. Avanza a través de tus pies, tobillos, pantorrillas, y así sucesivamente, hasta la coronilla de tu cabeza. El objetivo no es cambiar ni corregir nada, sino simplemente notar las sensaciones presentes: calor, hormigueo, presión, o tal vez una falta de sensación.
  • Respiración consciente: Siéntate o acuéstate en una posición cómoda. Coloca una mano en tu vientre y la otra en tu pecho. Sin intentar cambiar tu respiración, simplemente obsérvala. Nota la sensación física del aire entrando por tus fosas nasales. Siente el suave subir y bajar de tu vientre y pecho. Esta práctica ancla tu conciencia en el momento presente a través de un ritmo corporal fundamental.
  • Movimiento exploratorio: Elige una articulación simple, como tu hombro o cadera. Muy lentamente, comienza a moverla en pequeños círculos suaves. En lugar de buscar un rango completo de movimiento, concéntrate en hacer que el movimiento sea lo más fluido posible. Nota dónde sientes resistencia, rigidez o facilidad. No se trata de estirar, sino de explorar la calidad del movimiento y la sensación.

Aplicaciones para la salud de las mujeres

Un enfoque somático puede ser particularmente beneficioso para la salud de las mujeres. Proporciona una herramienta útil para cultivar una mayor conciencia del suelo pélvico, aprendiendo a distinguir entre tensión y relajación más allá de los simples ejercicios de Kegel. Al ayudar a regular el sistema nervioso, estas prácticas también pueden apoyar los ritmos hormonales naturales del cuerpo. Además, al cambiar el enfoque de la apariencia externa a la experiencia interna, la forma física somática puede ayudar a fomentar una relación más neutral y apreciativa con el propio cuerpo.

En conclusión, la forma física somática ofrece un camino para reconectarse con la inteligencia innata del cuerpo. Complementa el ejercicio tradicional al recordarnos que el movimiento puede ser tanto un acto de escucha como de acción. Es una práctica interna y tranquila que comienza con una sola pregunta: ¿Qué siento ahora mismo?


Aviso legal: Los artículos e información proporcionados por el Vagina Institute tienen únicamente fines informativos y educativos. Este contenido no pretende sustituir el consejo médico profesional, el diagnóstico ni el tratamiento. Siempre consulte con su médico u otro profesional de la salud cualificado ante cualquier pregunta que pueda tener sobre una condición médica.


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